domingo, 20 de junio de 2010

SIN TITULO

El panadero mientras amasaba el pan, recordó en robledal de su pueblo y soñó con mariposas blancas:

-    Respetar las montañas, cambiar el ritmo, estremecerse cuando suena el trueno y llenarse de fortuna al encontrar una rama de muerdago.  Yo me quedo con el silencio.

Con ternura y paciencia amasaba el pan. Hizo una hogaza, una barra con forma de sauce y pastelines con figura de truchas del río.

Al mismo tiempo en un despacho de Madrid, ejecutivos de Red Eléctrica diseñaban líneas de alta tensión y pasaban sus rotrings sobre unos planos, en los que el robledal y sus arroyos eran una mancha minúscula verde.

Ese día cuando la masa se le pudrió y salieron quemadas todas las cosas que horneó, el panadero no lo pudo explicar, ¿por qué ese día se estropeó toda su artesanía de harinas?

En ese instante en Madrid brindaban con champán. La gran obra esta decidida, ¿Daría de comer a mucha gente? Por el momento, ese mal pensamiento estropeaba el horneo del panadero.

 

5 comentarios:

  1. Muy bueno, Manolo. Crítica social contra la línea Sama-Velilla, el delito medio ambiental contra la montaña de León (España)

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  2. Para mas información www.samavelilla.blogspot.com

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  3. Muy, pero que muy bueno. Plantea eficazmente las distintas perspectivas. Por un lado las económicamente interesadas y por otro las espirituales, verdaderas y eternas. También toca el tema de las malas vibraciones.

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  4. Gracias Torcuato. La verdad que estamos en León haciendo lo posible para que no arrasen 87 km de masa forestal, solo para hacer ricos los bolsillos de unos pocos.

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  5. Un buen micro de protesta. Gracias, Manuel: nos faltaba el planteamiento de este tipo de temáticas. Gran aporte al vendaval.
    Un fuerte abrazo,
    PABLO GONZ

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